El 12 de septiembre de 1962 John F. Kennedy pronunció en Houston uno de sus famosos discursos: “Hemos decidido ir a la Luna. Hemos decidido ir a la Luna en esta década, y también afrontar los otros desafíos, no porque sean fáciles, sino porque son difíciles…”

 

   Siete años después, el 21 de julio de 1969, Neil Armstrong, dentro de su traje espacial, descendía las escalerillas del Eagle.

 

   40 años después, en febrero de 2009, David Brailsford, tras cerrarse el acuerdo entre GB Cycling y el operador de televisión por satélite BSkyB para patrocinar un equipo ciclista, emula en dificultad al presidente norteamericano: “Es un día emocionante, el comienzo de algo muy grande. El objetivo es ganar el Tour de Francia con un corredor británico ‘limpio’. Desde que me bajé del avión de regreso de los Juegos Olímpicos de Pekín he retomado el proyecto y he trabajado sólidamente. Todo parece dispuesto para el lanzamiento del equipo en 2010. Hemos hecho los deberes, sabemos los requisitos tanto fisiológicos como psicológicos que se necesitan para ganar el Tour de Francia, así como lo que se necesita desde el punto de vista del equipo. Aunque no debemos subestimar el tamaño del desafío y es una tarea enorme, no hay ninguna razón para que no se pueda hacer. Hay ciclistas británicos que podrían hacerlo, pero no puedo decir quién porque no especularé sobre individuos. Una de las claves para llevar a un ciclista a ese nivel es permitirle desarrollarse a cierto ritmo.”

 

   Cuatro meses después, con el objetivo de apartarse de la pésima reputación del ciclismo en cuestiones de dopaje, Brailsford afirma que “no se contratará a nadie con una infracción previa de dopaje, y eso reduce el campo. Es necesario examinar los antecedentes de los ciclistas y analizar sus datos biológicos para detectar cualquier cosa sospechosa. El médico del equipo olímpico, Roger Palfreyman, está creando protocolos para que quienes sean contratados puedan ser monitoreados ante cualquier anomalía. Además, quiero médicos británicos que no hayan trabajado antes en el ciclismo profesional.”

 

   El 9 de septiembre de 2009, Sky confirma a sus seis primeros ciclistas, los británicos Steve Cummings, Russell Downing, Chris Froome, Geraint Thomas, Peter Kennaugh e Ian Stannard.

 

   Steve Cummings está “encantado de unirse al equipo Sky. Ser parte de un equipo ciclista británico será bueno para la moral, estoy seguro de que todos los británicos nos ayudaremos y nos motivaremos unos a otros para alcanzar otro nivel.”

 

   Russell Downing cree que “no se trata de demostrar que soy el mejor ciclista británico por haber ganado dos años seguidos el Premier Calendar, se trata de demostrar que puedo competir contra los mejores del mundo. Creo que puedo conseguir resultados en el nivel más alto y espero poder tener la oportunidad de demostrarlo en un equipo británico. Va a ser realmente emocionante.”

 

   Chris Froome tiene “muchas ganas de planificar toda una temporada. Es un lujo que nunca he tenido porque Barloworld siempre ha dependido de las invitaciones para poder ir al Giro o al Tour. No quiero simplemente estar en las carreras, quiero sacar el máximo de mí mismo, y creo que este equipo me ayudará a hacerlo.”

 

   Para Peter Kennaugh “es genial convertirme en profesional, y hacerlo con el equipo Sky es perfecto porque significa que trabajaré con todas las personas que me han ayudado y animado hasta ahora en mi carrera: Dave Brailsford, Shane Sutton, Rod Ellingworth y Max Sciandri. Sé que tienen en cuenta mis intereses y que no nos tratarán como simples carteles publicitarios de nuestros patrocinadores.”

 

   Ian Stannard también dice que “es bueno ser parte de un equipo británico tan grande. Estoy muy emocionado, y con tantos corredores británicos el ambiente será genial. Estar en este equipo me ayudará a mejorar a desarrollarme como ciclista.”

 

   Para Geraint Thomas “ya era hora de que Gran Bretaña tuviese un equipo profesional de primer nivel para participar en el Tour de Francia. Sé que la pista y la carretera son diferentes, pero creo que se transferirá el mismo enfoque y la mentalidad de que lo primero serán los corredores. En ese sentido, el equipo Sky será una continuación del equipo de Gran Bretaña.”

 

   Aunque no quiere dar nombres, el elegido por Brailsford para comandar el escuadrón británico y pisar lo más alto del podio de Paris es el multidisciplinar Bradley Wiggins. Con contrato en vigor con el equipo Garmin, Wiggins, de 29 años, tercero en el Tour de Francia de 2009 tras la descalificación de Lance Armstrong, consigue finalmente formar parte del naciente equipo: “Si el objetivo para el próximo año es el Tour de Francia, entonces estaré en las mejores condiciones posibles en julio.”

 

 

   Con Alberto Contador desposeído de su victoria por un desconcertante positivo por clembuterol, Bradley Wiggins finaliza el Tour de Francia 2010 justo detrás de Lance Armstrong, en la posición 23, a casi 40 minutos del vencedor, Andy Schleck. Es un batacazo tremendo a sus aspiraciones, y ciertamente necesitará de “big gains” si en el futuro quiere aspirar al triunfo en la ronda gala.

 

   Dave Brailsford analiza en profundidad la temporada y cree que uno de los errores de Sky fue focalizar sus esfuerzos en un único ciclista y en un único evento, el Tour de Francia, y plantea algunas modificaciones de cara al 2011: “Creo que la forma en la que hemos seleccionado a 30 ciclistas y cómo distribuiremos su calendario antes del Tour nos ayudará a crear un equipo central para el Tour. Esta vez saben lo que se espera de ellos. Son cosas simples pero bastante difíciles de llevarlas a la práctica. Queremos intentar competir durante toda la temporada, y ese cambio se adaptará a Bradley. Se trata de competir y no tener miedo al fracaso. Su cuarto puesto en el Tour del 2009 cambió su vida tanto profesional como financieramente, pero el tamaño de las expectativas quizás no sólo tuvo un impacto psicológico sobre él, también físico. El gran nivel de forma que tenía en 2009 le pesó. Lo consiguió, pero no lo había perseguido, y esa es una gran diferencia. Tenía que volver a llegar a ese nivel, y entró en una dinámica desafiante. Este año el objetivo es entrenar correctamente, correr lo mejor que se pueda, hacer todo bien y ver cómo va todo. El trabajo de Bradley será ser rápido encima de la bicicleta, eso es todo, pero será importante tener ciclistas a su alrededor que puedan asumir parte de la responsabilidad.”

 

   El plan de Dave parece no tener fisuras y la carretera lo demuestra. Bradley Wiggins se impone en el Critérium del Dauphiné y confirma estar preparado para iniciar el asalto al Tour de Francia. Otros dos británicos, en un equipo Sky con una estructura jerarquizada inviolable, intentarán ayudarle a conseguirlo: Ben Swift y Geraint Thomas. Sin embargo, Bradley debe abandonar al romperse la clavícula en una caída en la séptima etapa. Geraint Thomas es finalmente el primer británico en la clasificación general, a algo más de una hora del vencedor Cadel Evans. Contar con una sola baza tiene sus riesgos y Dave Brailsford debe seguir mejorando su receta hasta conseguir la mezcla perfecta de todos los ingredientes necesarios para imponerse en el Tour, y la mala suerte es una sustancia que no debe desdeñarse.

 

   La Vuelta a España disputada un mes después supone la confirmación al más alto nivel del equipo Sky. Tras la descalificación por irregularidades en su pasaporte biológico del vencedor, Juanjo Cobo, Bradley Wiggins es segundo en la clasificación general tras un compañero de equipo, el también británico Chris Froome, cuya aparición estelar sorprende a impropios y extraños.

 

   Bradley Wiggins afronta la temporada 2012 con gran optimismo: “He dejado de ser exclusivamente un contrarrelojista y me he convertido en más escalador, manteniendo mi fuerza en las cronos. Me da mucha autoconfianza, me siento un atleta diferente. Me siento una persona diferente en muchos sentidos. Me siento mucho más profesional y dedicado a mi oficio de lo que solía ser. Tengo la oportunidad de ser líder del equipo Sky cuando entro en los mejores años de mi carrera y tengo el potencial de estar arriba en el Tour de Francia. Puedo ganarlo, lo demostré el año pasado. No muchas personas pueden hacer eso, y no muchas personas pueden competir en los Juegos Olímpicos una semana después.”

 

   Bradley Wiggins gana en un mismo año la París-Niza, el Tour de Romandía, el Critérium del Dauphiné, el Tour de Francia y el Campeonato Olímpico Contrarreloj. A pesar de su grandioso año, la jerarquía en el equipo pasa de las manos del primigenio Wiggins a las del segundo clasificado en el Tour de Francia, Chris Froome. Ningún ciclista británico había conseguido ganar el Tour de Francia a lo largo de su historia, pero Brailsford, en una década prodigiosa, consigue que tres británicos suban en primera posición las escalerillas del podio del Tour de Francia en seis de las siete ediciones disputadas entre 2012 y 2018. En 2019 un colombiano gana el primer Tour de la historia para Colombia, también bajo el halo de la cara más influyente de Sky, Dave Brailsford.